Exposición Bibliográfica
Zaragoza cuna de la imprenta [23 marzo 2013 - 30 junio 2013]
La exposición Zaragoza cuna de la imprenta, los primeros impresos zaragozanos, 1475-1549, organizada por la Biblioteca de la Universidad de Zaragoza, tiene como fin dar a conocer la labor de los primeros impresores afincados en Aragón y destacar la importancia de Zaragoza como uno de los emplazamientos cruciales en la difusión de la imprenta en España. A su vez quiere señalar la relevancia de la colección de primeros impresos zaragozanos que conserva la BUZ, algunos de los cuales son únicos o es muy escaso el número de ejemplares conocidos.
La muestra reúne una selección de 43 obras, entre las que se incluyen 16 incunables. Merecen especial mención, por ser piezas destacadas, el Manipulus curatorum, primera obra salida de las prensas zaragozanas, el libro de salmos Expositio super toto psalterio, magnífico ejemplo de incunable con orla xilográfica coloreada a mano y el Misal de Tarazona, uno de los primeros libros con notación musical impresa.
La colección expuesta se organiza en torno a dos apartados.
El primero de ellos (vitrinas 1 a 10) destaca los elementos esenciales que identifican estas primeras ediciones a través de los ejemplares conservados en la Biblioteca Universitaria, y a su vez ofrece una idea ajustada de la producción zaragozana en los primeros años de su historia.
El itinerario se inicia con ejemplos de las primeras portadas (o de su ausencia); le siguen los diferentes tipos de letra gótica y romana; los elementos estructurales de las páginas, como son las signaturas tipográficas, los reclamos y la foliación; las iniciales xilográficas en sus diferentes estilos; los grabados a toda página, un elemento en el que los primeros impresos zaragozanos destacaron por su riqueza; los textos preliminares, especialmente los que contienen dedicatorias; los colofones y las marcas de impresor, elementos en los que la imprenta de Zaragoza demostró su carácter innovador; finaliza el recorrido con unas muestras de encuadernación de estilo mudéjar.
A través de estos ejemplos se puede apreciar hasta qué punto los primeros impresos pretendían emular en su apariencia a los manuscritos, y cómo adquirieron progresivamente entidad propia a medida que sus artífices fueron conscientes de la importancia de la nueva técnica.
El segundo apartado (vitrinas 11-19) está dedicado a los primeros impresores establecidos en la capital del Reino de Aragón.
Junto a breves apuntes biográficos se exponen muestras de las ediciones salidas de sus talleres. Nada mejor que estos ejemplares para transmitir el ímpetu y la iniciativa de sus artífices.
La BUZ conserva muestras de los maestros impresores más conocidos que se establecieron en Zaragoza de 1475 a 1549. Siguiendo el orden marcado por la cronología de su labor tipográfica, se han organizado con el siguiente resultado:
- Mateo Flandro (1475)
- Enrique Botel y Juan Planck (1476-1484)
- Pablo Hurus (1476-1499)
- Juan Hurus (1485-1491)
- Leonardo Hutz y Lope Appentegger (1499-1503)
- Jorge Coci (1499-1539)
- Pedro Hardouyn (1528-1536)
- Juana Millán (1537-1544) y (1448-1550)
- Diego Hernández (1545-1548)
- P. Bernúz y B. de Nájera (1540
La exposición concluye con un último apartado(vitrina 20) dedicado a las obras de Jerónimo Borao y Juan Manuel Sánchez, dos grandes bibliógrafos zaragozanos, pioneros en el estudio de los primeros impresores aragoneses.
El camino que ellos iniciaron ha sido continuado por otros investigadores, que han incorporado nuevos datos y referencias bibliográficas.
Debemos agradecer especialmente a Manuel José Pedraza y Miguel Ángel Pallarés la información aportada en sus investigaciones. Sus estudios han servido de gran ayuda para documentar la exposición y profundizar en el conocimiento de este revolucionario invento que se instaló en tierras aragonesas el año 1475 y, más allá de satisfacer una demanda, actuó como un revolucionario factor de cambio de consecuencias insospechadas.